17 noviembre, 2011

La mirada lejana al agro en los primeros 100 días de Humala


Casi todo el país habla sobre la presencia de la minería y sus implicancias en el país. Ya sea si hablan sobre los efectos negativos o positivos, lo importante es que hablan y el tema está en la agenda mediática. Sin embargo, una importante actividad como la agraria sigue siendo considerada como una cenicienta más.
Epifanio Baca, investigador de Propuesta Ciudadana afirma que “los niveles de pobreza se mantienen debido a que continúa faltando una política orientada al agricultura rural”. Precisamente la agricultura, a diferencia de la minería, puede dar empleo a millones de peruanas y peruanos en el sector rural, y además es una actividad estratégica para garantizar la Seguridad Alimentaria del país y para construir un desarrollo sostenible.

Y ese “sigue siendo” es preocupante, ya que ahora estamos en un gobierno que prometió inclusión social y reducción de la pobreza, y que llegó al poder bajo los lemas de no abandonar a la agricultura peruana y a las miles de familias campesinas que dependen de ella. Sin embargo en estos primeros 100 días del gobierno del presidente Humala “extrañamente” no hemos visto un gesto político que avizore una gran reforma de la agricultura peruana en el país,actividad que es el motor de la reducción de la pobreza. La llave aún no ha entrado a encender ese motor.
A pesar de ello, el gobierno de Humala sigue manteniendo esa “mirada lejana”que muchos otros gobiernos han tenido con la pequeña y mediana agricultura, según se puede interpretar de un reciente estudio realizado por OXFAM y Propuesta Ciudadana.
Giovanna Vásquez, coordinadora de la campaña CRECE de Oxfam en Perú, alerta la necesidad urgente de que “el actual gobierno impulse el desarrollo de la pequeña agricultura. No existen políticas claras en favor de un sector productivo que es la despensa alimentaria del país”.
Un impulso que no se ha visto reflejado en un gesto simbólico en los primeros 100 días del gobierno de Humala. Muy por el contrario, la agenda mediática relacionada al agro ha centrado su lupa en temas de menor profundidad pero que venden más periódicos o hacen más rating: en los presuntos conflictos de intereses del Ministro Caillaux y en sus acciones empresariales.
Menos plata, menos presupuesto, menos agro.
Según Epifanio Baca, el presupuesto destinado al desarrollo de la agricultura en Perú es demasiado bajo, si lo comparamos con el gasto por habitante que realizan otros países vecinos.Otorgar un mayor presupuesto a la agricultura del país, hubiera sido un gran gesto político y simbólico del presidente Humala, en sintonía con sus promesas de campaña. Sin embargo ese “hubiera sido” nunca se cumplió, y el actual gobierno continúa el mismo camino de indiferencia de las anteriores gestiones de García, Toledo y Fujimori, ya que ha destinado un pobre presupuesto a la pequeña agricultura.
BrasilUS$ 334
ColombiaUS$ 163
PerúUS$107
Lo más preocupante es cuando vemos las cifras del presupuesto agrario en aquellas regiones donde están concentradas las mayores tasas de pobreza. “Las regiones más pobres son las que menos presupuesto percápita recibenpor parte del Estado”, afirma  Baca.
ApurímacUS$79
HuancavelicaUS$64
CuscoUS$35
Sin embargo entregar un mayor presupuesto no significa tampoco una garantía completa para lograr el desarrollo del agro peruano. También es necesaria una buena capacidad de gestión y de gasto en las regiones y en las OPDs del Ministerio de Agricultura. En medio del proceso de descentralización, muchos funcionarios regionales todavía carecen de estas capacidades de gestión. Sin embargo, el aumentar el presupuesto agrario, acompañado de un plan descentralizado de desarrollo de capacidades, “hubiera sido” un gran gesto político del actual gobierno.
RICARDO MARAPI
rmarapi@cepes.org.pe
@ricardomarapi